“Gràcies per acompanyar-nos”
Éstas son las palabras de agradecimiento que un cliente nos expresó recientemente. Para nosotros es uno de los mejores elogios, porque acompañar a los clientes en sus necesidades, expectativas, demandas y, también, en sus incertidumbres e inquietudes, es uno de nuestros principales valores.
Aunque somos profesionales de la comunicación, como en toda relación, ésta también se tiene que trabajar y sólo con voluntad por parte del cliente y del equipo se consigue la confianza y el feeling necesarios para trabajar con éxito la comunicación. Desde el primer minuto trabajamos con este objetivo para generar un clima de confianza y entender las aspiraciones y las peculiaridades de cada cliente. Es aquí donde la empatía es una característica indispensable para crear este buen clima de trabajo que incrementará el valor de la comunicación.
Éste es el potencial de un buen acompañamiento. Los clientes que contratan una agencia desconocen los planes y las estrategias de comunicación y, por lo tanto, hay que invertir tiempo en explicar cada una de las acciones de comunicación y el por qué. Esta pedagogía permite crear este espacio de confianza para sacar el máximo a la comunicación. ¿Cuáles son los principales requisitos para hacer este camino de manera conjunta? De entrada el cliente debe creer en el valor y la efectividad de la comunicación, debe tener los objetivos claros y dedicarnos un mínimo de tiempo, poco, pero muy bien aprovechado para detectar oportunidades comunicativas.
Cuando este acompañamiento se siente como real y efectivo, que significa que el cliente se siente comprendido y acompañado, la dinámica es buena, las consultoras nos convertimos en mucho más que en "manos ejecutoras". Somos asesoras que contribuimos a definir el relato de la empresa, los mensajes para cada público, crear nuevos canales de comunicación, a reducir los efectos de una posible crisis de comunicación, a preparar las intervenciones públicas ... En definitiva, a hacer un acompañamiento en todo lo que tenga que ver con la comunicación, que es casi todo, porque todo comunica. Así es como se consiguen día a día los objetivos de comunicación.
Con un acompañamiento real, el cliente sabe en todo momento en lo que estamos trabajando y cuáles son los siguientes pasos. La agencia de comunicación, sin embargo, también debe saber, en todo momento, lo que pueda afectar el negocio porque es la responsable de la imagen y de la reputación de la empresa. Es interesante acompañar las empresas en este proceso, donde, poco a poco y generando relación, ven que la tarea de la agencia no es sólo la nota de prensa y hacer de enlace con los medios de comunicación, sino que va mucho más allá. Es el momento en que las compañías que externalizan los servicios de comunicación ven a las agencias como una parte más de su negocio, aunque no compartimos el mismo espacio físico.
En Undatia Comunicación, las consultoras nos gusta ponernos en la piel del cliente y el cliente siente que le estamos haciendo un traje a medida: es una conjunción ideal. En este punto es cuando el cliente se siente agradecido y todo fluye en pro de la comunicación. Es cuando nos dicen "gracias por acompañarnos".